Todo lo que al jueves le faltaba, al viernes le sobraba. Me desperté varias veces por la noche, normal. Yo no soy de mucho dormir y me había acostado demasiado pronto. A las 7 de la mañana me tiré de la cama y me dispuse a aprovechar todas las horas del día empezando por el amanecer.
A lo lejos el pantano se desperezaba en un horizonte practicamente limpio de nubes. Estuve caminando por los alrededores del pueblo, intuyendo realidades tras la sombras, oyendo el guirigay de las aves que anidan en las orillas del pantano, pendiente del susto que cualquier perro suelto pudiera darme, sin alejarme demasiado. La noche había sido dura, dispadas las nubes, la helada era fuerte, las fuentes y arroyos estaban helados y a las afueras del pueblo un caballo yacía a medias entre el asfalto y el prao. Puede que estuviera dormido pero daba la impresión de haber muerto de hipotermia.
Puente sobre el pantano, al fondo el pueblo de Lanchares
A la hora y media volví al hotel, desperté a mi hija y una vez recogidas nuestras cosas emprendimos camino, dispuestas a resarcirnos del mal día anterior. Entre Lanchares y La Población está el Centro Ornitologico del embalse del Ebro. Intentamos ver aves con sus potentes primáticos, vimos algunos patos y otras palmipedas, pocas, porque no era la época, nos contaron que muy cercana a Lanchares hay una pequeña presa construída para regular el agua en esa zona ya que es un lugar dónde anidan numerosas especies de aves acuáticas. También vimos un montón de gansos que acababan de llegar dos días antes y que me parecieron enormes.
Volvimos a bordear el pantano por el lateral Norte, entramos en todos los pueblos que forman el municipio de Campoo de Yuso o lo que es lo mismo Campoo de abajo.
Campoo de Yuso, después de las transformaciones derivadas de la creación del pantano, hereda el nombre de la vieja Hermandad que formó parte de la Merindad de Campoo a comienzos de la Edad Moderna.
Subimos a la Ermita de la Virgen de las Nieves desde la que pudimos contemplar todo el pantano y distinguir pueblo por pueblo. No sólo los del municipio de Campoo de Yuso sino también los correspondientes al otro municipio que formó la Merindad de Campoo, Las Rozas. El municipio por el que entre la niebla nos paseamos el día anterior.
Subiendo a la Ermita nos encontramos a ambos lados de la carretera 14 mojones con azulejos de cerámica representativos de cada uno de los pueblos que forman este municipio. Un Via- Crucis?. El 5 de Agosto es la fiesta de la Virgen de las Nieves y los vecinos de Campoo lo celebran en este lugar.
El municipio de Campoo de Yuso está formado por los pueblos: Corconte, La Población, Lanchares, La Riva, Quintanamanil, Servillas, La Costana, Servillejas, Bustamante, Villasuso, Monegro, Quintana, Villapaderne, Orzales.
No fueron muchas las vacas que vimos en este zona, en cambio había muchos caballos, creo que eran astúrcones o parecidos, tal vez monchinos... caballos toscos, robustos y de poca alzada.
Iglesia románica de Santa María la Mayor en Villacantid (Reinosa)
Animadas por el día decidimos continuar viaje hasta la estación de esquí de Alto Campoo. Aunque sabíamos que no encontraríamos nieve. La semana anterior el sol y el viento Sur la habían deshecho.
Mostrar todas las iglesias románicas que vimos estos dos días haría larguisima esta entrada.
Nos cundió el día. Nos alejamos del pantano, aún se ve al fondo en la imágen de arriba, y subimos parando también en todos los lugares.
Arriba, la estación de esquí estaba cerrada. Las vistas desde allí hacia el Valle merecían la pena..