domingo, 4 de julio de 2010

Un domingo en Palencia

No sé cuántas veces he estado en Palencia. Por motivos familiares he ido a media docena de bodas. Por motivos familiares también, fué el lugar donde cambiaba el tren por el autobús para llegar al pueblo de mis abuelos.

También recuerdo haber pasado unas ferias de San Antolín días antes de empezar en la Universidad. Y lo recuerdo porque al primero de mis compañeros de carrera lo conocí allí.

Otras veces he ido a ver a amigos, primos...etc.

Que pinta la tórtola en este tema? ni idea, se ha colado y aquí se queda. En realidad tiene todo el derecho, me hizo compañía mientras comía en una terraza del Paseo del Salón. Fué y vino una docena de veces a coger palitos, si eran para su nido se ha construído un peazo apartamento.

Mercado de abastos, al lado de la Diputación provincial.

Es curioso, las mañanas de los domingos el centro de las ciudades está casi desierto. Es cómo si todo el mundo se hubiera ido a la playa. El mercado de abastos fué proyectado por Juan Agapito Revilla y construído en 1889.

Juan Agapito Revilla fué arquitecto municipal de Valladolid, a él se debe el desvio del río Esgueva de la ciudad (esto para el herrerillo), recopiló documentación perdida en el ayuntamiento y con todos los datos amplió la Historia de Valladolid, publicando en el Norte de Castilla artículos sobre el Valladolid antiguo. Creo que Valladolid le debe muchisimo a este arquitecto palentino.

Actualmente la diputación de Valladolid está editando muchas de sus aportaciones.

Ayuntamiento de Palencia.
Se oían campanas en las iglesias cercanas, y a pesar de todo la Plaza Mayor estaba vacía; un niño jugando a la pelota y pequeños grupos de gente en el lateral del Este intercambiando cromos.

Un pequeño mercadillo bajo los soportales. He intentado pensar con qué me quedaría de los objetos de la foto si me tuviera que quedar con algo. Me quedaría con el telefonillo-mechero que está al lado del salero. con uno igual le gastamos una broma a mi hija un día... se levantó tres veces a coger el telefono...mientras los demás nos moríamos de risa.
La plaza mayor fué construida como casi todas en Castilla como lugar de mercado. Los soportales eran imprescindibles. Aquí los inviernos de antes eran muy duros, los de ahora también pero menos.
Como toda ciudad castellana Palencia tiene su Plaza Mayor y su calle principal, calle Mayor en este caso que no se esforzaron demasiado en el nombre. Casi un kilometro de calle, tiene soportales en uno de los laterales y se han destruído muchos de sus antiguos edificios. En su lugar se han colocado otros y a veces te preguntas cómo se ha podido tener tanta falta de sensibilidad y de sentido de la estética.
Y a pesar de todo esta calle Mayor sigue teniendo su encanto.
En qué cosas me fijo verdad? dos balcones, estaban al mismo nivel, separados por un mirador. Las flores? no, los muñecos colocados para ver la calle, alguna niña pensó que así se aburrirían menos.
Colegio de Villandrando. Si la ciudad de Valladolid le debe mucho a Juan Agapito Revilla la de Palencia le debe otro tanto a Jerónimo Arroyo, proyectó este edificio, y también el edificio de la Diputación de Palencia en el que en la nochebuena de 1966 moriría su hijo, jefe de bomberos, apagando un incendio.
Varios edificios de la calle Mayor.
La entrada al Casino, también en la calle Mayor. Mural de estilo modernista de Rafael Oliva


Ermita románica de San Juan Bautista de Villanueva del Río trasladada piedra a piedra al Parque Huerta del Guadián en Palencia.
Villanueva del Río es uno de los pueblos que desapareció bajo las aguas del pantano de Aguilar.
Esta ermita fué construida en el siglo XI.

y para finalizar tres esculturas de las que a mi me gusta encontrar en las ciudades;
el muy merecido monumento a la castañera obra de Daniel Calvo Pérez,
el monumento a la infancia, La niña de la comba, obra de Ursicino Martinez,
y el merecidísimo monumento a los mayores en el Paseo del Salón obra de Sergio García.

4 comentarios:

larous dijo...

Nunca he estado en Palencia Lur, pero por la sfotos me recuerda mucho a esta ciudad en la que vivo.

El año pasado habia unas estupendas visitas guiadas por la ciudad, en una de ellas, que consistia en patearse Valladolid aprendiendo cosas de los maravillosos edificios de principios del siglo XX, se habló de Juan Agapito Revilla.

suculentas en venta dijo...

Este señor curiosamente llevaba el mismo apellido que una antepasada mía allá por el siglo XVIII...y es de su mismo pueblo, aunque él debió nacer a finales del XIX...

Así es que desde que conocí su biografía lo considero un poco como de la familia :DDDD

Palencia no tiene gran cosa que ver salvo la catedral por dentro que es fantástica. Y la calle Mayor que aunque está ya muy desfigurada aún conserva el sabor de las viejas ciudades castellanas.

Lo tienes al ladito.

besucos

WALDEN dijo...

gracias por hablar de nuestra Palencia, te dejas a los palentinos que si somos modestamente, gran cosa, con todas nuestras virtudes y defectos
un saludo cibernético desde la cubierta y a través del océano virtual

suculentas en venta dijo...

Walden claro que sí. Yo me siento palentina de pura cepa...creo que fuí la primera de mi familia que nació fuera de Palencia, siempre me he sentido de allí. De niña envidiaba a mi hermano porque él era palentino y yo no...jajaja.

Saludos, espero que sepas nadar...